
El exgobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, negó categóricamente tener problemas con la ley o vínculos con el narcotráfico, diferenciándose de los casos de los también exmandatarios Tomás Yarrington y Eugenio Hernández.
A través de un comunicado, Cabeza de Vaca respondió a la publicación “Tomás Yarrington y cuatro exgobernadores de Tamaulipas que enfrentan problemas con la Ley”, asegurando que “hay diferencias” claras entre su caso y el de sus antecesores.
“Yo actué con firmeza y determinación contra los cárteles de la droga, a diferencia de ellos”, puntualizó el exgobernador panista.
Acusa a AMLO de persecución política
En su mensaje, Francisco García Cabeza de Vaca acusó directamente al expresidente Andrés Manuel López Obrador de orquestar una persecución política en su contra utilizando instituciones del Estado como la Fiscalía General de la República (FGR).
“Fue una persecución cobarde y desmedida, con calumnias, fabricación de delitos y órdenes de aprehensión sin sustento legal”, denunció.
El exmandatario afirmó que López Obrador se comportó como “un vil extorsionador”, presionándolo para entregar Tamaulipas a cambio de cancelar los procesos legales.
“Yo no me arrodillé como otros exgobernadores que aceptaron embajadas o una senaduría. Cuando me rehusé, empezaron a actuar en mi contra”, señaló.
Diferencias con Yarrington y Hernández
Cabeza de Vaca subrayó que Tomás Yarrington y Eugenio Hernández fueron procesados por el gobierno de Estados Unidos, el cual los relacionó directamente con cárteles de la droga.
“Ambos fueron acusados de lavado de dinero y se emitieron órdenes de extradición. En el caso de Yarrington, ya cumplió condena; mientras que Hernández mantiene vigente su orden de captura y solicitud de extradición”, indicó.
Además, criticó que Eugenio Hernández ocupe actualmente una cartera relevante en el Partido Verde, pese a sus antecedentes.
Acusaciones contra Américo Villarreal
En el mismo comunicado, Cabeza de Vaca también señaló al actual gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, por supuestos vínculos con el crimen organizado y su presunta participación en el llamado “huachicoleo fiscal”.
“Tarde o temprano habrá de rendir cuentas ante la justicia, en particular por el grave daño fiscal al erario público”, advirtió.
Francisco García Cabeza de Vaca reiteró su inocencia, denunció un uso político de las instituciones judiciales durante el sexenio de López Obrador y se distanció de las acusaciones formales que pesan sobre otros exgobernadores de Tamaulipas.