San Pedro Garza García, NL.- Durante su informe de gobierno, el gobernador de Nuevo León abordó uno de los desafíos más significativos de su administración: la crisis del agua.
Describió esta situación como “la crisis más difícil que me ha tocado sortear”, y expresó su agradecimiento a todos aquellos que colaboraron en la solución de este problema, incluidos funcionarios del gobierno federal, constructoras y el personal de Agua y Drenaje (AYD), quienes se dedicaron a trabajar día y noche para lograr avances significativos.
Uno de los logros más destacados fue la construcción del acueducto Cuchillo II, una obra que fue finalizada en “tiempo récord” y que ha permitido aumentar la capacidad de abastecimiento de agua en la región.
El gobernador también mencionó la Presa Libertad, cuya capacidad es ocho veces mayor que la de la Presa de La Boca, lo que representa un avance crucial en la gestión de recursos hídricos del estado.
Asimismo, el mandatario hizo hincapié en la tecnificación del riego, una medida que ha permitido optimizar el uso del agua en la agricultura y otros sectores.
“Hoy les puedo decir que estuvimos listos cuando vino Alberto; se aprovechó cada gota, y hoy tenemos las presas llenas”, subrayó, destacando el esfuerzo colectivo y la planificación estratégica que han llevado a cabo para enfrentar la crisis hídrica.
Con estos esfuerzos, el gobernador reafirmó su compromiso de continuar trabajando en soluciones sostenibles para garantizar el acceso al agua en Nuevo León y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.