
El cantante británico Liam Payne, exintegrante de One Direction, no dejó testamento antes de su fallecimiento en octubre de 2024, lo que ha activado el proceso legal para determinar la distribución de su herencia conforme a las leyes de sucesión intestada de Inglaterra y Gales.
Payne, quien perdió la vida tras una trágica caída desde el tercer piso del hotel Casa Sur en Buenos Aires, dejó un patrimonio estimado en 24.3 millones de libras esterlinas (alrededor de 28.6 millones de euros antes de gastos y deudas). Sin un testamento que designara herederos específicos, su fortuna será administrada por las personas legalmente más cercanas: su expareja Cheryl Tweedy y el abogado Richard Mark Bray.
Cheryl Tweedy, con quien mantuvo una relación entre 2016 y 2018, es madre de su único hijo, Bear, de ocho años. Se ha informado que Tweedy planea establecer un fideicomiso para proteger el patrimonio en beneficio del menor.
La muerte de Payne conmocionó al mundo del entretenimiento. El informe forense concluyó que el cantante murió debido a múltiples traumatismos y hemorragias internas y externas, producto de la caída.