
El clavadista mexicano Osmar Olvera regresó a México tras hacer historia en el Mundial de Deportes Acuáticos en Singapur.
Con solo 21 años, Olvera rompió casi 20 años de dominio chino en el trampolín de tres metros y se coronó campeón mundial, logrando también el reconocimiento como mejor clavadista masculino del torneo.
Fue recibido en el AICM por su familia, amigos y fanáticos, acompañado por su entrenadora Ma Jin, a quien agradeció por su apoyo.
“Estoy muy feliz, es un sueño cumplido. Quería ganar y lo logré. Es el inicio de un gran ciclo olímpico”, comentó.
Osmar suma ya ocho medallas en tres campeonatos mundiales y no esconde su próximo objetivo: el oro olímpico en Los Ángeles 2028.
Su historia inspira y confirma que el talento mexicano está listo para brillar a nivel mundial.