
Estados Unidos y la Unión Europea lograron un “buen acuerdo” comercial que evita una escalada arancelaria y marca un giro en las tensas relaciones económicas bilaterales.
El anuncio se realizó este domingo en Turnberry, Escocia, tras una reunión entre el presidente de EU, Donald Trump, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Tras poco más de una hora de diálogo, ambos líderes coincidieron en calificar el pacto como “bueno para todos”.
“Es un acuerdo muy poderoso, el más grande de todos”, declaró Trump, quien añadió que la UE se comprometió a comprar 750 mil millones de dólares en energía estadounidense y a invertir otros 600 mil millones en el país.
Von der Leyen destacó que el acuerdo representa la apertura del mercado europeo a productos estadounidenses y el inicio de una etapa de equilibrio comercial. “Fue una negociación difícil, pero llegamos a una conclusión positiva”, comentó.
Aunque aún se desconocen los detalles, el pacto llega antes del 1 de agosto, fecha límite que había fijado Trump para imponer aranceles de hasta 30 % a productos europeos si no se lograba un entendimiento. También reiteró que los gravámenes no serán inferiores a 15 % para mantener una base de negociación firme.
Trump mencionó que otros países, como Japón y México, también están en proceso de negociar acuerdos similares. En el caso mexicano, advirtió que, de no llegar a un acuerdo, podrían imponerse aranceles del 30 %.