
La Casa Blanca arremetió contra la serie South Park tras el estreno del episodio “Sermon on the Mount”, con el que arrancó la temporada 27. En él, el expresidente Donald Trump aparece envuelto en situaciones absurdas, compartiendo escena con Satanás y lanzando guiños a la polémica lista de Jeffrey Epstein.
El capítulo se estrenó en medio de un contexto tenso entre Paramount y figuras cercanas a Trump, especialmente tras la cancelación del programa The Late Show con Stephen Colbert, uno de sus críticos más reconocidos. El episodio también presenta otras tramas satíricas, como Jesús intentando tomar el control de una escuela primaria y una crisis emocional de Cartman tras perder su emisora favorita, lo que algunos interpretan como una crítica encubierta a la salida de Colbert.
En respuesta, Taylor Rogers, portavoz de la Casa Blanca, declaró a Rolling Stone que South Park “carece de contenido auténtico y original”, y calificó a la serie como “irrelevante desde hace más de 20 años”.
“El presidente Trump ha cumplido más promesas en seis meses que cualquier otro mandatario. Ningún programa de cuarta categoría va a detener su éxito”, sentenció.
El episodio ha reavivado el debate sobre los límites de la sátira política y el impacto de la animación en la conversación pública.