
Dos años después de un accidente que le cambió la vida, Eduardo Rocha Cervantes, de 21 años, continúa esperando justicia. Con una protesta simbólica sobre un puente peatonal y un pastel conmemorativo, sus familiares y amigos recordaron aquel 15 de julio de 2023, cuando un bache en Morones Prieto, a la altura del Puente Guadalupe, provocó que Eduardo volcara en su motocicleta.
El accidente le causó daño cerebral severo, lo dejó con epilepsia y sin una parte de su cráneo. Hoy permanece postrado en cama, sin poder caminar, trabajar o realizar actividades básicas.
“Llevo dos años de puro dolor. El accidente que sucedió hace dos años y que aún no tiene respuesta me cambió por completo la vida”, expresó Eduardo.
Antes del accidente, Eduardo era el principal sustento económico de su familia y tenía planes de abrir un negocio propio. Hoy enfrenta no solo las secuelas físicas, sino también la frustración de ver a su familia luchar por salir adelante sin su apoyo.
“Estar en cama sin poder hacer nada, ni siquiera ir al baño… Ver a mi familia batallar por dinero cuando antes yo podía ayudar, me pesa bastante”, agregó.
La familia ha iniciado un juicio de responsabilidad administrativa contra la administración municipal anterior, encabezada por Cristina Díaz, a quien acusan de negligencia por no atender las condiciones de la vía.
El abogado del joven, Candelario Maldonado, criticó la falta de sensibilidad de las autoridades:
“Negaron todo. Dijeron que el bache no existía y que Eduardo no llevaba casco. Ha habido evasivas y cero empatía”, denunció.
Hoy, Eduardo enfrenta una posible cirugía de reconstrucción craneal y una lucha diaria por mantenerse estable.
Su familia espera que este nuevo llamado sirva para presionar a las autoridades y obtener una indemnización digna, que ayude a recuperar parte del futuro que le fue arrebatado.