Este 7 de julio, Ringo Starr, ex baterista de The Beatles, cumple 85 años, convirtiéndose en el primer integrante de la banda en llegar a esta edad. A diferencia de muchas figuras de su generación, sigue activo, grabando música, dando conciertos y compartiendo su clásico mensaje de “paz y amor”.
Nacido como Richard Starkey en Liverpool, tuvo una infancia complicada, marcada por graves problemas de salud. Pasó meses hospitalizado por peritonitis y neumonía, y fue durante una de esas estancias que descubrió la batería, cuando un empleado le llevó una pequeña percusión para distraerlo.
Aunque no se considera un baterista técnico, su estilo único lo convirtió en uno de los más influyentes del rock. En The Beatles, interpretó temas como “Yellow Submarine” y “Octopus’s Garden”, que aún hoy son muy populares. También incursionó en el cine, destacando su participación en la película “El Cavernícola” (1981), filmada en México. “Me decían que actuara como yo mismo, y eso hacía”, comentó con su característico humor.
Pese a los años, no se deja atrapar por la solemnidad ni el mito. Él mismo lo resume con sencillez: “Estoy aquí porque pasó, pero no hice nada para que ocurriera, aparte de decir que sí”.
Durante una conferencia reciente para presentar su álbum “Look Up”, insistió:
“Ante la violencia y la crisis, lo mejor es dar todo con emoción y disfrute. La música puede trascender idiomas para comunicar lo importante: amor y paz”.
A sus 85 años, Ringo Starr sigue demostrando vitalidad, sencillez y optimismo, siendo un ejemplo de cómo la música y la actitud positiva pueden trascender el tiempo.
