
En el tercer día de deliberaciones, el jurado emitió un veredicto mixto en el juicio federal contra Sean “Diddy” Combs. El artista fue absuelto de los cargos más graves, como tráfico sexual y conspiración de crimen organizado, pero condenado por transportar personas con fines de prostitución, una violación a la Ley Mann.
El veredicto significa que Combs, de 55 años, evita una posible cadena perpetua, pero podría enfrentar hasta una década en prisión, lo que marcaría un duro golpe para su carrera como magnate de la música y figura pública.
Los fiscales lo acusaban de manipular a sus parejas para participar en encuentros sexuales con trabajadores sexuales masculinos, supuestamente bajo drogas. Sin embargo, el jurado no encontró pruebas suficientes para los cargos de tráfico sexual ni de crimen organizado.
Durante la audiencia final, Combs mostró alivio al levantar el puño discretamente al ser absuelto de los cargos más severos. Sin embargo, su estado de ánimo fue más reservado al conocerse la condena por el delito vinculado con la prostitución.
Los fiscales utilizaron como testigos clave a Cassie, expareja de Combs, y a Daniel Phillip, un bailarín masculino presuntamente contratado por el rapero. La defensa insistió en que las relaciones fueron consensuadas y que el caso fue un intento por criminalizar su estilo de vida.
Aún no se ha fijado la fecha de sentencia.