
Monterrey, NL.– A pesar de mantener un rezago de más de mil 600 expedientes, los diputados del Congreso de Nuevo León se tomaron un nuevo periodo de receso legislativo que se extenderá por 42 días, dejando en pausa múltiples iniciativas y reformas clave.
Este miércoles, el presidente en turno de la Diputación Permanente, José Manuel Valdez, concluyó los trabajos legislativos y citó hasta el 6 de agosto, fecha en la que se reanudará la actividad parlamentaria. Con ello, los legisladores locales –incluidos panistas, priistas, emecistas, morenistas, petistas, ecologistas e independientes– no sesionarán durante más de un mes.
El receso se suma a los otros dos periodos de inactividad que ha tenido el Congreso en menos de seis meses: uno en diciembre por las fiestas navideñas y otro durante Semana Santa. En abril, aunque se acordó una ampliación del periodo ordinario de sesiones, el Pleno no sesionó sino hasta el 26 de mayo para instalar la Diputación Permanente.
Durante el mes de junio, los diputados sólo acudieron al pleno cuatro veces, al sesionar únicamente los días miércoles.
“Ya tenemos muchos años dando julio para que los compañeros diputados puedan agendar sus periodos vacacionales con sus familias”, justificó Carlos de la Fuente Flores, presidente de la Comisión de Coordinación y Régimen Interno (COCRI).
Entre los temas que quedaron sin resolver se encuentran iniciativas como la Ley de Economía Circular, la Ley de Fomento al Turismo, la Ley de Fomento a las Pymes, la Ley de Ciberseguridad, así como reformas en materia judicial, transparencia y despojo, además de la aprobación de la licencia solicitada por el diputado Miguel Flores.
Desde Morena, el diputado Jesús Elizondo aseguró que no todos tomarán vacaciones y que hay voluntad de avanzar desde las comisiones y reuniones de trabajo.
“Necesitamos reuniones y ver qué sacar para darle solución a la ciudadanía. El Legislativo no debe estar paralizado. Hay periodos marcados en la ley, y su servidor no se va de vacaciones”, declaró.