
En el marco del Día Mundial de las Personas Refugiadas, la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) presentó el reporte del monitoreo de protección en México, el cual señaló que, durante el 2024, el 53 % de las víctimas de desplazamiento forzado mencionaron ser víctimas directas de violencia o amenazas.
El monitoreo “Tendencias y desafíos del desplazamiento forzado en México”, realizado en 19 ciudades, destacó que, por primera vez, las mujeres representaron la mayoría de la población encuestada, siendo el 55 %.
Dentro de los testimonios recogidos, se expresó que el 43 % de las personas en movilidad sintieron temor ante la situación general de inseguridad y, a la vez, el 37 % de los encuestados señaló a la falta de empleos o bajos ingresos como motivo principal.
A su vez, el 76 % de las personas encuestadas afirmó que enfrentarían un riesgo significativo en caso de regresar a su país de origen, por lo que podrían ser reconocidos como refugiados en el sistema de asilo mexicano.
El reporte presentado por la Acnur señala que las cifras son similares y consistentes con las recabadas durante el 2023, lo que confirma la urgencia de contar con políticas sólidas y que traten desde la raíz el desplazamiento forzado en la región.
Según lo expuesto en el informe, el 55 % de las personas desplazadas viajaban en grupos familiares y el 45 % restante, de forma individual. Cabe resaltar que un tercio de la población encuestada eran niñas, niños y adolescentes.
El porcentaje de mujeres desplazadas no fue lo único que aumentó, ya que, durante 2023, la población encuestada mencionó haber sufrido algún incidente de seguridad previo a llegar a México en un 42 %, mientras que los datos del 2024 subieron al 58 %.
Ya en el terreno nacional, las personas refugiadas y migrantes reportaron haber sufrido algún incidente violento en un 40 %, aunque en la zona norte del país esto aumenta a un 64 %, siendo las principales denuncias: secuestro, extorsión, robo y amenazas físicas.
Por último, el informe refleja una realidad en la que, por motivos desconocidos, las autoridades mexicanas se han visto sobrepasadas, ya que, durante el 2023, el 31 % de personas encuestadas no contaban con ninguna documentación emitida por las autoridades, mientras que, en este 2024, aumentó más del doble, con un 83 % de ellos sin alguna documentación emitida.
“Estos hallazgos refuerzan la necesidad de contar con una política de asilo sólida y de largo plazo, que garantice protección desde el momento de la llegada hasta la integración efectiva de las personas refugiadas en las comunidades de acogida”, destaca la Acnur.